«El placer que nos destierra«, escrita y dirigida por José Luis Serrano a partir de textos de César Vallejo fue estrenada en Alcalá de Henares en 1989
“Me doy en la forma más libre que puedo y ésta es mi mayor cosecha artística.
¡Dios sabe hasta qué punto es cierta y verdadera mi libertad!
¡Dios sabe cuánto he sufrido para que el ritmo no traspasara esa libertad y cayera en libertinaje!
¡Dios sabe hasta qué bordes espeluznantes me he asomado, colmado de miedo, temeroso de que todo se vaya a morir a fondo para que mi pobre ánima viva!
Lo que importa principalmente en un poema es el tono con el que se dice una cosa, y secundariamente lo que se dice.
Lo que se dice, en efecto, es susceptible de pasar a otro idioma; pero el tono con que eso se dice, no.
El tono queda inamovible en las palabras del idioma original en el que fue concebido y creado (…), se traducen las grandes ideas, pero no se traducen los grandes movimientos animales, los grandes números del alma, las oscuras nebulosas de la vida, que residen el giro del lenguaje, en una tournure, en fin, en los imponderables del verbo.”
César Vallejo
En palabras de su autor, la dramaturgia espectáculo “El placer que nos destierra” es un fruto trilce dado de la forma más libre y humana posible. La puesta en escena interpreta un proceso dramático a través del tejido biológico de un idioma ancestral.
Por ello, el discurso poético teatral aliado al pensamiento profundo del poeta alimenta con los imponderables de su verbo personajes angustiosamente vivos, sintetizados en el misterio de la luz tísica y la sombra gorda.
La ánima autóctona de César Vallejo, que se expresa en dos idiomas encontrados, nos invita a buscar un tercero a la hora de traducir su matemática de cordillera; este idioma es espacial, ya que con el modo arriba se juega la vida intentando rescatar los tonos con que se dicen las cosas de un poema, esos tonos que desvelan los grandes movimientos animales, los grandes números del alma, y las oscuras nebulosas de la vida; potencial soberbio acuñado en la palabra transmitidos por el instrumento más elástico, más capaz de emocionar y de conjugar la magia de la naturaleza poética, el actor vivo con su máscara verdadera.
Ficha artística
Por orden de intervención
Teresa Vallejo
Antonio Bueno
Juan Diego
Pilar Pereira
Ángeles Ladrón de Guevara
Enrique López Villanueva
Valentín Gascón
Pilar Ruiz Marín
Jaro
Músicos
Luis Gutiérrez: Vientos, percusión y voz
José Manuel Gamboa: Guitarra
Mariano Marín: Piano y teclados
Ficha técnica
Paco Ibañez: Composición musical parda los poemas: El Poeta a su Amada, Piedra negra sobre piedra blanca
Mariano Marín: composición y dirección musical
Christian Rouviére: Diseño escenografía, cartel y dossier
Antonio López cede generosamente a la compañía la reproducción de su obra Atocha para el cartel de la función
Julia Martínez: Diseño de vestuario
Julio Gil: Fotografía
David Álvarez: Diseño iluminación
Fernando Andrés: Carpintería y atrezzo
Pilar Ruiz Marín: Ayudante de dirección
José Luis Serrano Onsurbe: Dramaturgia y dirección
Colaboración especial de Waldo Moll, Claqué
Y la ayuda inestimable de: Santiago Ganuza-Apricot, Shole Ejeazi- Amaranta y José Fuente del Pilar-Miraguano